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Breves.



"No te pido que vuelvas solo que me resucites en tu pensamiento siempre que la noche te golpee desnuda y las sábanas sean el único escudo para el dolor de recordarme."

"Mientras todos se sacian después de haber alimentado sus mentes de conversaciones desatinadas otros siguen viendo como el mundo no hace más que crear personas moribundas. Es la lucha de contrastes como resultado de la prestidigitación del tiempo."

"Hay cosas que están hechas solo para personas que son de otro material, hechos por el final del verso, frutos de besos perfectos, de fotos con amaneceres para el recuerdo. Los que les duele hasta el nombre, fértiles de pena, pero es lo que caracteriza a estos hombres."

"No somo más que basura en un puño que nos aprieta, es el yugo de las adversidades matando por la misma inercia de la ignorancia e incoherencia que nos sacude."

"Con las manos negras de bregar con demonios, de partirse la cara por escribir lo que luego puedes ver en mis ojos, rimar es el reto que un día se pudo la agilidad."

"La arena del reloj se escapó por el agujero de cagarla una, otra y otra vez, ya no hay ritmo ni sonata que haga coordinar palabras entre ambos desconocidos, no existe la necesidad de que sigas aquí, sigas."

"Él le pedía que no le contara amor vestido de hipocresía, que no le hiciese soñar si iba a ser la alarma que lo despertaría, no me emborraches, decía, si no vas a estar a la mañana siguiente para sujetarme la cabeza por si poto mi resaca, sus ojos le pedían que se abstenga de hacerle agonizar entre sus peores interiores."


Me voy con pisadas grandes, el teléfono descolgado y agujeros por los que me he deshecho.



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Blue train.

Yo también iba en esos ritmos, fui aquella trompeta, el trombón, las teclas de ese piano, por encima de ese bajo y por el techo de esa batería. En un sueño era el aire cruzando notas, siendo melodías en oídos del 57, arte, gran calibre y máximo exponente no solo un negro esclavo, también la sensación del momento porqué yo con él abrazaba ese éxito. ¿Y hoy quién te recuerda? ¿Qué ojos te sangran? ¿Dónde están las sirenas? Mis páginas te contestan, Valencia te contesta, desde aquí hasta tu lápida donde suenas todas las noches, en tu cementerio de la cultura. Fuiste arte sin voz pero si con nombre, y así mueren mis noches bajo sábanas de música, sobre sueños por cumplir: colgando de lo más alto de la mentira. Lo que no pude ser fue aquel saxofón tenor John, no pude serlo, aquello que era solo tuyo y de la música. https://www.youtube.com/watch?v=cRLIdnHnc84

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