Fui tu pareja de swin en el balcón de los papeles escritos que vuelan a casa, con legañas en los iris, sin el corazón dejado en tu puño. Entre fachadas mojadas pude sentir en el pecho, tu gemido. Descubrí que hay carreteras secundarías y paralelas al naufragio, lo vi en el vino de tus labios, en las gaviotas dibujadas de tus ojos junto al mapa sideral estampado en tu cara, hecho de pecas. Me has enseñado el mantel amarillo sobre tu niñez de vuelta, has humedecido la palidez arenosa, he visto la despedida bajando vertical por tus pómulos. Chica bohemia, alternativa, de pelo mediterráneo, ojos de playa orillada y restos químicos en el tabique, eres bálsamo ardiendo, bolsillos rotos llenos de billetes, eres Heroes de Bowie. Después de tu nombre el verano vendrá cargado de terrazas y cervezas sin ti, te absorberá ese pueblo, no dolerá porqué distancia es la mi padre y su abandono a los 3 años. Has pintado con el ver
Buscadme en mundo del limbo y el arte, en el abrazo y el reinicio.