Los viajes que hicimos, el cartón
desgastado de acariciar el bolsillo,
como las tragedias por tus labios.
Imaginé paradas entre tus piernas
porque querer quedarme en ellas
era ir más allá.
Hay andenes escondidos en las cuevas
de las déspotas miradas del tiempo,
es todo lo que esperamos.
Lo que no cumplimos en el pacto con
nosotros mismos y la mirada tenue
pare todas nuestras inseguridades.
Ya nos advertía el presente que el
futuro se nos iba a quedar demasiado
largo, a expensas.
Con la armónica el hombre del metro
sustanciaba tus pasos, el parpadeo de
tus piernas.
La canción en vena que sale de tus
labios, otros que te oyen lo llaman tu
voz, la mía.
Pensé conocerte en aquel abandono
creyendo que volverías, que me
seguirías en este triste guión.
Ya lo había notado entre mi sombra
como sabiendo que el imposible para
nosotros estaba pactado.
Te puedes largar, sin esperar, como
aquel metro que pasaba delante de mi
abandono.
Yo me seguiré levantando con tu nombre
en la ropa y en las suelas de cuando te
pisé bailando.
Y te esperaré en el andén del tiempo
quebrado y el verso para ti.
Fui a la parada de tu metro para
dejarte mis últimas ilusiones,
recógelas en cada espera.
https://www.youtube.com/watch?v=rwJu9kLhgVE
desgastado de acariciar el bolsillo,
como las tragedias por tus labios.
Imaginé paradas entre tus piernas
porque querer quedarme en ellas
era ir más allá.
Hay andenes escondidos en las cuevas
de las déspotas miradas del tiempo,
es todo lo que esperamos.
Lo que no cumplimos en el pacto con
nosotros mismos y la mirada tenue
pare todas nuestras inseguridades.
Ya nos advertía el presente que el
futuro se nos iba a quedar demasiado
largo, a expensas.
Con la armónica el hombre del metro
sustanciaba tus pasos, el parpadeo de
tus piernas.
La canción en vena que sale de tus
labios, otros que te oyen lo llaman tu
voz, la mía.
Pensé conocerte en aquel abandono
creyendo que volverías, que me
seguirías en este triste guión.
Ya lo había notado entre mi sombra
como sabiendo que el imposible para
nosotros estaba pactado.
Te puedes largar, sin esperar, como
aquel metro que pasaba delante de mi
abandono.
Yo me seguiré levantando con tu nombre
en la ropa y en las suelas de cuando te
pisé bailando.
Y te esperaré en el andén del tiempo
quebrado y el verso para ti.
Fui a la parada de tu metro para
dejarte mis últimas ilusiones,
recógelas en cada espera.
https://www.youtube.com/watch?v=rwJu9kLhgVE
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